sábado, 8 de diciembre de 2012

Diferencias entre la bandera española actual y la de la Segunda República Española.





miércoles, 5 de diciembre de 2012

El ruso, el obispo y la corona


Alejandro Rodríguez Benítez



El pequeño país pirenaico de Andorra es, desde hace siglos, un coprincipado. El Obispo de Urgell, Joan-Enric Vives i Sicília, y el Presidente de la República Francesa, François Gérard Georges Hollande, son, actualmente, sus copríncipes. Sin embargo, a principios del siglo XX, en concreto en julio de 1934, tuvo lugar un curioso episodio de la historia andorrana, el reinado de Boris I.

Boris I de Andorra
El barón ruso Borís Mijáilovich Skósyrev Mavrusov, con unas revolucionarias ideas de cambio, libertad y modernización, y tras haber tomado contacto con la vida política del principado, convenció a la mayoría de los miembros del Consell General de Andorra para que lo proclamasen rey. Un día después, el 8 de julio de 1934 el representante de Encamp, el único miembro del Consell General que se opuso al nuevo monarca, comunicó la situación al Obispo de Urgell. El reciente monarca anunció un nuevo gobierno, una constitución y total libertad política, religiosa y de imprenta. 

La República Francesa, que no se interesó demasiado, manifestó su intención de no intervenir y de aceptar las voluntades del Consell General. Sin embargo, el Obispo de Urgell, Justí Guitart i Vilardebó, no tardó en actuar, enviando a la Guardia Civil española a detener al nuevo monarca, poniendo fin al corto reinado de Boris I. Sin que sus súbditos hicieran nada por impedirlo, el monarca fue esposado y trasladado a La Seu d'Urgell, a la mañana siguiente a Barcelona, posteriormente a Madrid y, finalmente, expulsado a Portugal.

Al breve Boris no le dio tiempo a cambiar ningún símbolo de Andorra y durante su reinado se siguió utilizando la bandera adoptada por el principado en la segunda mitad del siglo XIX, consistente en tres franjas; azul, amarilla y roja; con una corona en el centro. 

Bandera de Andorra descrita en Through the High Pyrenees, 1898.

Aunque es una bandera bastante desconocida y de la que es difícil encontrar información clara y documentada en la red, sí podemos afirmar que aparece ya mencionada en 1898 en la página 67 de Through the High Pyrenees de Harold Spender.


"We were not fortunate enough to see the Andorran Council General in session, any more than we witnessed the fetes and dances which were seen by M. Vuillier on the occasion of the Feast of St. Etienne. During the session the Andorran flag—with three horizontal linesot blue, yellow, and red, and a crown in the centre—hangs out of the window."


Además, una publicación de National Geographic de 1917 indica que dicha bandera fue adoptada en 1866.


"732. [...] The blue, yellow and red flag of Andorra, with its coronet in the center, is the youngest thing in the nation. It is only fifty years old, having originated in the reform of 1866 to emphasize the autonomy of the valley; but neither of the co-suzerains has approved it. It is displayed when the council is in session."


Algunos autores afirman que las franjas horizontales únicamente se utilizaron durante la Segunda República Española (1931-1939); por simpatía con el vecino país y similitud con su bandera. Además, hay controversia en la orientación de la barras e incluso en el orden de los colores. Es posible que esto careciera de importancia en aquellos años e incluso que convivieran varias banderas de forma simultanea en el principado. Además, las entonces malas comunicaciones del pequeño país pudieron contribuir a que no se difundiera una información muy clara sobre esta insignia.

Versión de la bandera disponible en Wikipedia.

Durante resto del siglo XX, una vez terminada la Guerra Civil Española, Andorra utilizó la que es hoy su bandera. Consta de tres franjas verticales; azul, amarilla y roja. En esta disposición es idéntica a la de Rumanía o Chad por lo que, para diferenciarla, se presenta con el escudo del principado en su centro. Se  fijó de forma oficial, tras aprobar la constitución e ingresar en la ONU, en documentos emitidos por el Consell General d'Andorra en 1996 y 1999.

Bandera actual del Principat d'Andorra.

sábado, 1 de diciembre de 2012

VIH/SIDA: historia, datos y símbolo


Alejandro Rodríguez Benítez



Desde 1988, el 1 de diciembre se celebra el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA. Esta fecha nos recuerda, cada año, la importancia de la prevención, la concienciación, el apoyo a los afectados y la movilización de recursos económicos para la investigación y el tratamiento de la enfermedad. Según datos de la OMS, en 2011 hubo 2,5 millones de nuevos casos de infección por el VIH a nivel mundial, y se calcula que 1,7 millones de personas murieron por esta causa. 

El síndrome de la inmunodeficiencia adquirida (SIDA) está producido por el virus de la inmunodeficiencia humana VIH-1 y VIH-2. El SIDA es consecuencia y la etapa avanzada de la infección por VIH, por lo que no son sinónimos. No todas las personas portadoras del VIH tienen SIDA, pero todas las personas con SIDA tienen el VIH. Es una patología que conocemos desde hace poco (años 80) pero que ha tenido un gran impacto sanitario, mediático y social desde su aparición. 


Historia de la enfermedad


Tanto el VIH-1 como el VIH-2 son infecciones zoonóticas, es decir, se pueden transmitir de animales a humanos. El chimpancé central (Pan troglodytes troglodytes) se considera el reservorio natural para el VIH-1 y es muy probable que sea la fuente original de la infección en humanos. El VIH-2 tiene una relación filogenética muy estrecha con el virus de la inmunodeficiencia del simio, presente en el mangabey fuliginoso, una especie de primate que habita en la costa occidental africana. 

La pandemia actual tuvo su origen en África pero pasó desapercibida hasta que llegó a los países ricos. Las muestras humanas más antiguas con VIH provienen de marinos que posiblemente contrajeron la enfermedad a principios o mediados del siglo XX, a través de contactos sexuales con prostitutas en las costas africanas. 

En 1981, se comunicaron cinco casos de neumonía inexplicada por Pneumocystis jiroveci en varones homosexuales previamente sanos en Los Ángeles y casos de sarcoma de Kaposi en 26 pacientes varones homosexuales, con o sin neumonía por P. jiroveci, en Nueva York y Los Ángeles. Ambas enfermedades era conocidas, sin embargo, la coexistencia de ellas en varios individuos homosexuales llamó la atención de la comunidad médica. Se descubrió, además, que los individuos afectados padecían otras enfermedades de carácter oportunistas (que habitualmente no afecta a las personas con un sistema inmune sano) y presentaban un bajo nivel en sangre de una célula inmune, el linfocito T CD4+.

En unos meses, la enfermedad empezó a describirse en usuarios de drogas por vía parenteral (jeringuillas) y en receptores de transfusiones sanguíneas. Sin embargo, hasta 1984 no se demostró claramente que el causante del SIDA era el VIH. 

Las primeras víctimas de la enfermedad eran rechazadas por amigos y familiares, aisladas por la sociedad. Los niños infectados eran expulsados de las escuelas por el miedo al contagio. Ese fue al caso de Ryan Wayne White, que padecía hemofilia y fue contagiado por una transfusión contaminada con el virus, siendo expulsado de su colegio. El colectivo homosexual fue culpado de la aparición y diseminación de la enfermedad, incluso se llegó a afirmar que era un castigo de Dios por sus conductas. 

La enfermedad se extendió, rápidamente, por todo el planeta y hoy, aproximadamente 34 millones de personas en todo el mundo viven infectados con el virus. De ellos, 3,3 millones son niños menores de 15 años (datos de la OMS, 2011). 


Actualmente la enfermedad no tiene cura. Sin tratamiento, una persona infectada por el VIH no suele tener una esperanza de vida superior a los 7-10 años. Sin embargo, un diagnóstico temprano, con un tratamiento correcto y realizado de forma adecuada hacen posible que los pacientes con esta patología tengan una esperanza de vida cercana a la de la población general, con buena calidad de vida. 


¿Por qué el VIH daña el sistema inmune? 


Tras el contagio, el VIH se une a las células que presenten en su membrana el receptor CD4, siendo, principalmente la célula del sistema inmune conocida como linfocitos T CD4+, aunque también lo tienen otras células de la inmunidad. El virus entra en la célula y usa la maquinaria genética de la misma para fabricar múltiples copias virales. Los nuevos virus abandonan la célula, ésta muere, y las copias buscan nuevos objetivos para repetir el ciclo, produciéndose una disminución progresiva del número de linfocitos T CD4+. El consiguiente deterioro del sistema inmune del individuo lo hace susceptible de sufrir enfermedades infecciosas, afectación neurológica y neoplásicas (cáncer) que terminarán produciendo su muerte. 

Coloreados en verde, VIH-1 en un cultivo de linfocitos.


Transmisión del VIH 


El VIH se transmite a través de relaciones heterosexuales y homosexuales, incluyendo el sexo vaginal, anal u oral; por el contacto con sangre y hemoderivados; y por el contagio de la madre infectada a su hijo durante el parto, periodo perinatal o a través de la lactancia. El virus se ha podido aislar en otros fluidos corporales, sin embargo, no hay pruebas de que se pueda producir el contagio a través de lágrimas, sudor, orina o saliva. No existe ningún caso documentado de la transmisión del VIH a través de besos en la boca. Teóricamente sería posible si ambas personas tuvieran heridas sangrantes en la cavidad bucal pero se considera muy improbable debido a la existencia de factores inhibidores del virus en la saliva. 

Las relaciones heterosexuales sin protección son la primera causa de contagio del VIH a nivel mundial y también en España. La transmisión por uso compartido de jeringuillas, importante en los primeros años, ha disminuido debido a la reducción de esta práctica y a la implantación de programas de control. El riesgo de contagio a través de transfusiones de sangre y hemoderivados es, hoy en día, extraordinariamente pequeño en países desarrollados gracias a las medidas adoptadas para evitarlo. En cuanto a la lactancia materna, en los países desarrollados, las madres portadoras del virus no deben amamantar a sus hijos por la posibilidad de contagio. Sin embargo, en los países en vías de desarrollo hay desacuerdo ya que la leche materna es la única fuente de nutrición suficiente para los lactantes. 

El VIH no se transmite con un abrazo, ni por mosquitos, ni por la participación en deportes, ni por tocar cosas que han sido tocadas con anterioridad por una persona infectada con el virus. 


Prevención de la transmisión del VIH en las relaciones sexuales. 


Preservativo de látex sabor fresa.

Para prevenir el contagio sexual es de suma importancia el uso del preservativo. Debe emplearse en el sexo vaginal, anal y también oral. No es un método eficaz en el 100% de los casos para prevenir la transmisión ni para evitar embarazos no deseados. Sin embargo, la mayor parte de los fracasos de este método de barrera se debe a roturas o a una utilización inadecuada, como no usarlo durante todo el acto sexual. Se recomiendan los preservativos de látex ya que se ha demostrado que los fabricados con pieles naturales dejan pasar el virus. No es aconsejable utilizar el mismo preservativo para el sexo oral y, después, en la penetración, ya que los dientes podrían dañarlo; es preferible usar uno nuevo. Además, los geles lubricantes a base de vaselina aumentan las probabilidades de que el preservativo se rompa y, por consiguiente, las probabilidades de transmisión.


El lazo rojo, símbolo de la lucha contra el SIDA. 


En 1991, el grupo de artistas neoyorquinos "Visual AIDS Artists Caucus" buscó un símbolo que mostrara apoyo y solidaridad con las personas diagnosticadas de SIDA, portadoras del VIH y con sus familias y allegados. Fueron inspiración los lazos amarillos en apoyo a los soldados estadounidenses que participaron en la Guerra del Golfo, eligiéndose, en esta ocasión, el color rojo por su asociación con la sangre y también con el amor y la pasión. El símbolo se popularizó enormemente cuando, en 1991, el actor británico Jeremy Irons lo lució en los Premios Tony. 

Actualmente, lo podemos ver en su forma tradicional (cinta doblada y sujeta con un alfiler o imperdible), en chapas, llaveros, pegatinas… Famosos y personalidades de todo el mundo lo llevan en sus solapas. Se incluye en la publicidad de las campañas de concienciación, en el material de ONGs, incluso en imágenes de perfil en Facebook, Twitter y otras redes sociales. 

Se trata, pues, de símbolo sencillo, muy fácil de crear por cualquier persona con un trocito de cinta roja,  identificable por una inmensa mayoría de la población, y que nos permite mostrar nuestra solidaridad y concienciación con un problema extendido por toda la Tierra y que afecta a la humanidad en su conjunto. 


domingo, 25 de noviembre de 2012

La estelada

Alejandro Rodríguez Benítez


Con la cercanía de las elecciones catalanas hemos podido observar la bandera estelada en eventos políticos, colgada de balcones, en medios de comunicación, redes sociales, etc. Su significado es conocido por la inmensa mayoría de los catalanes, sin embargo no ocurre lo mismo en el resto de España ni fuera de nuestro país.


La estelada (estrellada en castellano), es una bandera de carácter no oficial muy utilizada por el independentismo catalán. Se creó a principios del siglo XX y está basada en la bandera de Cataluña (la señera) y en la cubana. Esto se debe a que Cuba se había independizado de España unos pocos años antes y era un referente para las aspiraciones del nacionalismo catalán. 

La estelada nació como un símbolo temporal de insurrección, de deseos de independencia. Su creador o, al menos, su difusor, Vicenç A. Ballester, optó por usar la bandera tradicional catalana, la señera, en una Cataluña independiente.

“de bell nou la bandera de les quatre barres, la Bandera Catalana, sense estels, sense blaus, però amb tots els honors. Ben alta, ben dreta i ben sola!”

"de nuevo la bandera de las cuatro barras, la Bandera Catalana, sin estrellas, sin azules, pero con todos los honores. ¡Bien alta, bien derecha y bien sola! ".

Se sabe que, al menos, desde 1904 se utilizó una estrella asociada al independentismo catalán en sellos y algunas banderas. En 1908 aparece una estelada primitiva con un rombo central en lugar del triángulo lateral, fotografiada en la sede de la Lliga Nacionalista Catalana en París.

               

Posteriormente, en 1918 aparece la estelada blava (azul), usada tradicionalmente por el independentismo de derechas. La estelada groga (amarilla) o vermella (roja) nace en 1968 y fue muy promovida por el Partit Socialista d'Alliberament Nacional (PSAN), asociándose, tradicionalmente, a la izquierda independentista. Ambas esteladas son, hoy, las más difundidas y han perdido, en parte, su asociación con derecha e izquierda, llegando a usarse indistintamente.

              
                         Estelada blava                                                           Estelada groga o vermella

Aunque la estelada es una bandera muy presente en actos de carácter político y reivindicativo, no tiene carácter oficial. La bandera oficial de Cataluña es la señera (senyera en catalán) y presenta, únicamente, cuatro barras rojas sobre fondo amarillo, símbolo de la antigua Corona de Aragón.


lunes, 19 de noviembre de 2012

Símbolos masculino y femenino.


Alejandro Rodríguez Benítez


Estamos acostumbrados a observar los símbolos ♂ y ♀ en nuestro día a día y a identificarlos con el sexo masculino y el femenino respectivamente. Están ahí y todos sabemos lo que significan. Sin embargo, nunca nos paramos a pensar desde cuándo se utilizan o quién los usó por primera vez con su significado actual. 
                       
La violencia, la guerra, la agresividad… se han asociado desde hace milenios con el sexo masculino, y la belleza, el amor y la fertilidad con el sexo femenino. Estos dos grupos de cualidades fueron atribuidos por los antiguos griegos a las deidades Ares y Afrodita, y por los romanos a sus equivalentes, Marte y Venus.

Venus y Marte (Botticelli)
Ambas civilizaciones comenzaron a nombrar a los planetas distinguibles a simple vista como sus dioses, y nosotros, hoy en día, mantenemos la forma latina de esos nombres en Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno. Urano (único con nombre de divinidad griega) y Neptuno fueron descubiertos siglos más tarde, pero se optó por el mismo sistema. 

Desde la antigüedad, para representar a los planetas Marte y Venus, en escritos astronómicos, y al hierro y al cobre, en los textos alquímicos, se han utilizado los símbolos ♂ y ♀, respectivamente. Sin embargo, no fue hasta el siglo XVIII cuando, por primera vez, el naturalista Carl Linæus, padre de la taxonomía moderna, los utilizó para los sexos. 


Está muy extendida la asociación del símbolo ♂ con la representación de un escudo y una lanza, en referencia al dios Marte, mientras que ♀ representaría un espejo de mano, asociado a la belleza y a Venus. Ciertamente la semejanza es obvia y es posible que, desde hace siglos, se considerase a estos símbolos una representación de tales objetos, justificando, de esta forma, su uso en asociación con las deidades mencionadas. De hecho, tras el descubrimiento del planeta Neptuno, en el siglo XIX, se optó por utilizar un tridente como representación, siguiendo el mismo patrón. 
                   
No obstante, una teoría muy aceptada es que el verdadero origen, anterior a la asociación de estos símbolos con objetos propios de los dioses, lo encontramos en la evolución de las abreviaturas de los nombres dados por los griegos a los planetas Marte y Venus. Así, Θουρος (Thouros, Marte) se abreviaría como θρ y Φωσφόρος (Phosphoros, Venus) como Φκ. derivando con las sucesivas transcripciones en los símbolos que hoy conocemos.


Es sorprendente que símbolos que tuvieron su origen hace miles de años y en disciplinas tan alejadas de la cultura popular actual como son la astronomía y la alquimia hayan calado tan hondo en nuestra sociedad. La inmensa mayoría de las personas no solo conoce estos símbolos, sino que los utiliza y los asume con total normalidad. 

Alejandro Rodríguez Benítez 


Bibliografía: 
STEARN, William Thomas. The male and female symbols of biology. New Scientist, vol. 11, nº. 248 (agosto 1961), p. 412-413.


domingo, 18 de noviembre de 2012

El arpa de Irlanda


El arpa es un símbolo irlandés que ya en el siglo XIII se usó en la acuñación de moneda. Hoy forma parte del escudo de la República de Irlanda.


Escudo de la República de Irlanda


Un arpa sobre fondo verde es la bandera más antigua de la nación irlandesa. Su uso remonta, al menos, a 1642. 




La bandera de la actual provincia irlandesa de Leinster, que también se usa como pabellón naval, es muy similar a la usada en 1642. En ocasiones se utiliza para representar al nacionalismo irlandés y a la isla en su conjunto.


Bandera de la provincia irlandesa de Leinster y pabellón naval de Irlanda



miércoles, 14 de noviembre de 2012

Origen de la bandera de España


Carlos III convocó un concurso para elegir un nuevo pabellón para los buques de España. Se presentaron estos modelos:




El 28 de mayo de 1785 se eligió el ganador quedando de esta forma el pabellón de los buques de guerra y mercantes:




Además de ser muy visible en la lejanía y difícil de confundir, quizás se eligió por llevar los colores de Aragón, Castilla y Navarra.





Así pues, la bandera de España nace en 1785 como enseña naval de guerra para localizar nuestros navíos a grandes distancias.